lunes, 5 de enero de 2009

De olvidos y errores

Estoy viendo los niños muertos, cadáveres de blanco y sangre que se asoman impúdicamente a la portada de los periódicos. No sé si siento pena o tristeza, o ambas. Conflictos absurdos e innecesarios en la era digital de las comunicaciones y la globalización, en la que seguimos sin saber comunicarnos ni sentirnos globables. Veo que las guerras no son de broma, ni los objetivos militares las únicas víctimas, ni que sólo abaten a "los malos". Hoy los juguetes que reciben estos niños son balas de verdad. Ellos son "errores de sistema", "errores de guerra necesarios".
Y sigo viendo que no hay reuniones de urgencia en las altas esferas, o voces autorizadas que monten en cólera. No escupen denuncia desnuda, como sí la escupen los cadáveres de blanco y sangre. No veo a los cristianos movilizarse, ni al Papa apuntar con el dedo mostrando su indignación, que es la nuestra. Aunque confío en la oración y sé que estamos empujando, necesitaría un signo externo de que estamos ahí, de que nos hacemos presentes, de que el mundo nos importa. Porque nosotros sí somos globales, y el dolor de un niño en Gaza es también el mío, aunque ni siquiera lo conozca.

A pesar de todo lo que siento, sé que cerraré mi portátil y con él la ventana al mundo. Mi día quedará atrás como huella difusa. Y en breves momentos el sueño habrá cubierto de un espeso olvido todo lo que me hacía sufrir 5 minutos antes.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Hacía tanto que no te leía que por un momento había olvidado lo bien que escribes... En cuanto a mí, la carrera terminada, pero sólo la licenciatura de medicina. La otra avanzando, a pequeños grandes pasos. Mucho discernimiento, mucha oración y muchos muchos sueños. Ya te iré contando a medida que vaya avanzando. Un beso. Ah y aunque sea un poco tarde... FELIZ NAVIDAD Y AÑO NUEVO!!!!!!

Anónimo dijo...

¿De verdad has cerrado tu ventana al mundo? ¿y que haces en la romana tontito?? Te pongo un trocito de la carta de kenia q me gusta mucho.
"Donde estemos, busquemos, solos o con otros, algunos gestos que realizar en situaciones de dificultad. Descubriremos así la
presencia de Cristo incluso allá donde no lo hubiéramos esperado. Resucitado, está ahí, en medio de los humanos. Va por delante de
nosotros por los caminos de la compasión. Y ya ahora, por el Espíritu Santo, renueva la faz
de la tierra."

Muy chulas las últimas novedades de tu blog.
A ver si cuelgas más musiquita q me viene bien para practicar bachata.
Cuidate!

Rubén dijo...

Enhorabuena Ana, lo importante es no quedarse quietos!
Gracias Lola por tus cartas. Sigue poniéndome las pilas. Tanto tú como la gente que me sigue de cerca, no me dejáis solo. Palabras que son vida y compañía.
Muchos besos

Anónimo dijo...

A veces, hay que buscar la información sobre lo que realmente dice la Iglesia en el lugar dónde se genera. Mira en el siguiente enlac

http://www.zenit.org/article-29683?l=spanish

Manel dijo...

Molt bé, Rubén. Certament és trist. Però jo vaig més lluny (en els sentiments, no en els actes, com ho fas tu i molt bé ens recorda Lolita) ). I també sent indignació, rabia, cólera i fins i tot odi (sí, no son sentiments cristians, però és que jo no soc cristià).

Contra moltes coses, començant pels polítics israelians sense escrúpuls que fan de més de 1000 victimes la seua campanya electoral, passant pels terroristes de Hamas que, malgrat tot acabaran aquesta guerra com herois als ulls de la població de Gaza, i acabant amb el món occidental, incloent-hi les Nacions Unides y el propi Papa.

Si el Papa vulgués que la seua indignació fos patent, no s'hauria de buscar en llocs amagats per internet. Si el Papa no fos un polític com un altre, condemnaria totes les morts i tota injusticia, no només la de xiquets. Què passa? Els àrabs adults, les dones, el funcionaris no son subdits de Déu i del món al mateix títol que nosaltres? Les seues vides valen menys que les dels occidentals o els cristians?

Prou de hipocresia i d'eufemismes. Una condemna seria i real contra el genocidi a Gaza, expulsió dels embaixadors, bloqueig econòmic. Com a mínim que els israelians senten vergonya pel que fan. I per què no, interveció militar, l'ONU en té la prerrogativa, que l'utilitze.

1030 morts d'una banda y 15 de l'altra és una diferència massa gran, no resisteix cap analisi ètica (o moral). Aquests tios són més efectius del que Hitler va ser amb ells.

Ho sent. Havia de descarregar la meua indignació. Una abraçada molt forta, Rubén. I ara jo també tanque la meua finestra i continúe amb les meues coses...

Manel AF

Rubén dijo...

Manel, entenc el teu comentari (raonat i explicat). Pero nosaltres (cristians i no cristians) no creguem en l'odi i en la intervenció militar com a solució als problemes. Justament és lo que critiquem! Aixina que calma i avant.

Anónimo dijo...

Zakaj pa ne:)